Dejamos atrás un año lleno de novedades tecnológicas, ha sido precisamente la enorme rivalidad entre los gigantes tecnológicos lo que ha hecho que los consumidores podamos disfrutar de los productos más punteros. Ahora, por supuesto, no esperamos menos del 2018. Os presentamos algunas de las predicciones (aunque seguro que el año nos deja grandes sorpresas aún por desvelar).

La inteligencia artificial

Es la herramienta de la que todo el mundo habla y hablará, porque en realidad su desarrollo no ha hecho más que empezar. El reto es crear sistemas que aprendan, se adapten y actúen con autonomía, lo que a corto plazo ayudará en sectores como el reconocimiento de voz -se prevé que 2018 sea el año estrella para los asistentes de voz-, visión informática y el procesamiento del lenguaje natural. Se trata de una poderosa herramienta para mejorar la toma de decisiones, porque la inteligencia artificial modificará la manera en la que las personas obtienen beneficios a partir de los datos, independientemente de si se trata de seguridad digital en salud, transacciones financieras, etc.

¿El fin de los smartphones?

A pesar de su uso masivo, hay razones para creer en esta afirmación. La razón: el desarrollo de la realidad aumentada y nuevas tecnologías vestibles que dejarían a los teléfonos inteligentes en un segundo plano. La posibilidad de relacionarnos con el mundo de una forma totalmente nueva está a la vuelta de la esquina, así lo demuestran ya las gafas que registran nuestra información o los altavoces biométricos. Empresas como Facebook, Google, Microsoft, Alibaba, Snap o Apple han anunciado importantes inversiones en Realidad Aumentada, por lo que es de esperar que en un tiempo más breve de lo que pensamos estas tecnologías vestibles comiencen a proporcionar más que un hardware inteligente.

Vehículos autónomos y eléctricos

Los vehículos autónomos de Waymo ya circulan en pruebas piloto sin conductor de seguridad en Phoenix, Arizona. Este dato nos proporciona la clave para el futuro de los coches (y sobre todo de los taxis): los vehículos sin conductor podrán utilizarse tanto por particulares como en forma de servicio para sustituir a los taxis. Además el año 2018 será el de la consagración del vehículo eléctrico como la mejor opción, los gobiernos apostarán fuertemente por su popularización, y los usuarios se darán cuenta de que la autonomía ya no es un problema, sino que es más que suficiente para el 90% de sus necesidades.